Alberto Retana
David Martínez | Miércoles 23 de abril de 2014
Si en los cálculos del PSOE de Castilla-La Mancha no entraba la derrota del pasado 22 de mayo ahora la situación puede ser -para ellos- más grave de lo que se pueda pensar. Quizá tanto tiempo al frente de la Junta de Comunidades les haya podido hacer olvidar que hay vida más allá de las instituciones castellano-manchegas.
De hecho cientos de personas que ocupan cargos de confianza tendrán que engrosar las listas del SEPECAM en día 13 de junio o buscar la mínima posibilidad en los pocos organismos públicos que ha conservado el partido de la rosa y el puño. En cambio, Cospedal, Tirado, Conde, Riolobos, Burgos... contarán con cientos de despachos para ser ocupados por personas de libre designación, aunque su afán por la gestión austera quizá reduzca sensiblemente la nómina pública de esta región. Pero eso son futuribles que se comprobarán a partir del 16 de junio, tras la constitución de las nuevas Cortes Regionales de Castilla-La Mancha en las que el PP decidirá por la mínima mayoría que obtuvo hace diez días.
Un dilema mayor se cierne sobre el PSOE regional y es saber qué cabeza ocupará la Secretaría General si es que Barreda deja su puesto en el próximo Congreso Regional. Muchos dedos apuntan a Emiliano García-Page pero otros muchos se levantan para decir que no. Parece que las ampollas comparativas levantadas durante estos últimos cuatro años empiezan a escocer por haberse abierto las heridas. De hecho la provincia de Ciudad Real, feudo de Barreda, es la única que ha mantenido el tipo socialista en la debacle del 22M. Incluso, a pesar de la derrota de José Francisco Rivas en Talavera, voces con criterio en el PSOE calculan que estos próximos siete meses, hasta la convocatoria de las Elecciones Generales, pueden ser suficientes para que el todavía alcalde talaverano figure con poder en la lista al Congreso o al Senado.
Quien tiene el balcón repleto de espectadores es el PP, que mientras planifica su actividad gubernativa y el reparto de responsabilidades a nivel local, provincial y regional, se frota las manos viendo cómo las huestes malheridas de su contricante político aún miran hacia el cielo para saber por donde les cayeron las bombas.
Aventurábamos hace una semana que las quinielas sobre los puestos a ocupar por los concejales populares electos estaban casi completadas en la calle. Nosotros también tenemos la nuestra pero, por respeto y paciencia, esperaremos un poco más para hacerla pública, como la lista de todos los cargos públicos que ahora habrá que ocupar en todos los organismos que dependen del Ayuntamiento.
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