Mientras que Ángela Sánchez Oliva sigue evolucionando positivamente a los primeros estímulos y crece la esperanza en su familia, aunque recordamos que su estado sigue siendo estable dentro de la gravedad, la Policía Científica busca ahora la bala que la hirió en la mañana del pasado 9 de julio mientras caminaba a la altura del número 8 de la calle Alfares.
Varios agentes de la Policía Nacional, con la colaboración de los Bomberos y de la Policía Local, reconstruyeron la trayectoria que siguió la bala después de salir, supuestamente por accidente, del rifle, atravesar el cristal y herir a la joven de 25 años. Los policías localizaron el impacto de bala en la moldura metálica inferior del escaparate del local situado justo enfrente desde donde se produjo el disparo. El último uso al que se dedicó este local, en el número 3 de la calle Alfares, fue una tienda de cigarrillos electrónicos.
Los bomberos procedieron a cortar la parte de esta estructura donde estaba el agujero de bala para realizar averiguaciones en el caso, mientras que los agentes trataron de localizar el proyectil con una alambre en la estructura hueca que sostiene el cristal del escaparate. También fue necesario romper algunos rodapies para poder cortar el metal. Después de un cuarto de hora, los efectivos decidieron continuar con las labores de búsqueda este jueves con otro sistema más eficiente.
Tras estas indagaciones, todo hace suponer que la bala no se quedó en la cabeza de Ángela sino que siguió su trayectoria hasta impactar e introducirse en esta moldura metálica. De esta forma, en la cabeza de la joven se quedaría algún fragmento de metralla, ya que los proyectiles que se utilizan en este tipo de rifles se desintegran al impactar con un cuerpo.
Mientras la joven natural de Talavera, pero vecina de Los Navalmorales, continúa su evolución en la UCI del Hospital Nuestra Señora de la Salud de Toledo, Adrián B.R. Permanece en la cárcel de Ocaña tras el auto dictado el pasado viernes por el juez de Guardia, que le imputó un delito de homicidio en grado de tentativa, un delito de robo con fuerza y otro de tenencia ilícita de armas.