Cospedal hace historia al arrebatarle al PSOE el feudo regional tras 28 años

El Partido Popular ganó por primera vez las elecciones en Castilla-La Mancha y logró poner fin a casi tres décadas de gobierno socialista. Los 25 diputados obtenidos por los 'populares', cuatro más que en las elecciones del 2007, otorgan la presidencia de la Junta a María Dolores de Cospedal relegando a José María Barreda a la oposición, ya que los socialistas perdieron dos escaños en relación a la anterior cita electoral y obtuvieron 24.

Aunque desde el comienzo del escrutinio se vislumbró que el resultado sería favorable para los intereses del PP y la diferencia entre los dos principales partidos llegó a situarse en un 28-21, la noche electoral estuvo abierta hasta el final y la provincia de Guadalajara resultó, como se esperaba, decisiva para decidir el color del Gobierno regional.

Tras el reparto de escaño en Toledo (6-6), Albacete (5-5) y Cuenca (4-4) y la victoria del PSOE en Ciudad Real, tierra y bastión de Barreda, por 6-5, fue la provincia alcarreña la que dictó sentencia con 5 escaños para el PP por 3 para los socialistas.

En cuanto al número de votos, el PP fue la opción más votada con el 48% de los votos por el 43% obtenido por los socialistas. Izquierda Unida, tercera fuerza política, logró el 4% de los votos, porcentaje superior al logrado en anteriores citas electorales pero que se antoja insuficiente para poder acceder a las Cortes regionales. Por su parte, Unión, Progreso y Democracia (UPyD), se posiciona como cuarta fuerza política de Castilla-La Mancha tras lograr casi el 2% de los votos.

María Dolores de Cospedal, que siguió la jornada electoral en el Hotel Beatriz de Toledo, mostró su agradecimiento a todos los ciudadanos de la región que han apoyado el proyecto de los 'populares' por otorgar una victoria "clara y rotunda" a su partido y posibilitar un "día histórico para Castilla-La Mancha".

La futura presidenta de la Junta reiteró su compromiso de convertir la región en un tierra que ofrezca "más oportunidades, crecimiento, bienestar y empleo". En este sentido, aseguró que se va a "dejar la piel" trabajando por todos los castellano-manchegos y, especialmente, por aquellos que lo están pasando mal".