Sra. Cospedal

Excelentísima Presidenta de esta tierra ya más Mancha que Castilla.

A usted me dirijo sin ira y sin rabia, con mucho respeto, exponiendo una de las muchas situaciones de las que estoy seguro ni conoce ni le llegan, encriptada como está en su Plan de Garantías de los Servicios Sociales Básicos. Pero el martes día 22 de mayo (un año después de su acceso al poder) acudí a la consulta de Urología al Hospital de Talavera con mi octogenario padre (Dionisio) a la revisión periódica de su cáncer vesical. Tras la exploración, el doctor remitió diversas pruebas; una de ellas, una ecografía vesical. Tras esperar mi turno (de más de hora y media) en el mostrador de citaciones, la funcionaria tecleó… ‘Cita para el 14 de enero de 2013’. Bien, nada que objetar, porque seguro que hasta soy un privilegiado vista como está la lista de espera. Supongo que esto nada le dice y mucho menos le preocupa, entre otras razones porque con sus medios económicos usted podría realizársela de inmediato a cualquier de sus familiares en la medicina privada. Pero, señora Cospedal, Dionisio tendrá que esperar a que le llegue el día 14 de enero del año que viene, si por entonces el cáncer no ‘se lo ha comido’, porque su pensión no llega a los 600 euros y no se puede permitir lo que usted haría en su pellejo. Y es ahora cuándo vienen mis preguntas: ¿su política económica, y la del PP, pretende el empobrecimiento de los que menos tienen con la destrucción del sector público de la Sanidad? No voy a entrar en sus razones de recortes y ajustes, ni tan siquiera cabrearme porque cierre alas y quite camas en hospitales, los haga público-privados o los venda, haya que pagar las medicinas o las ambulancias, mande al paro a médicos y enfermeros, maestros y educadores. Simplemente, que no es de recibo que usted, y los suyos, se llenen la boca hasta aturdirnos con los de la ‘austeridad en el gasto y la eficiencia en la gestión que garantizarán la gratuidad y la universalidad de la Sanidad’. ¿A cambio de que gente como Dionisio pierda la vida? ¡Ese, y no otro, es el ‘drama de los pobres’.

Lo siento, señora, pero a eso yo no le puedo llamar Estado del Bienestar, porque no garantiza dar una asistencia sanitaria gratuita y universal. Se lo han dicho esta misma semana sus compañeros del PP de Cuenca y se lo digo yo. Y, sabe señora Cospedal (usted que es inteligente), ¿cómo se llama ese tipo de Estado? La organización que cobra bajo amenaza tras leyes arbitrarias promulgadas por ella misma se define... No hay dinero, lo sé, pero con la SALUD de los que mantienen sueldos tan privilegiados como los de esta CASTA política que sufrimos, ni se puede ni se debe jugar. Por cierto, y ya con un año en el poder, un simple consejo: ‘Buscar culpables es algo absurdo si no van a la cárcel y perder tiempo en ello, totalmente improductivo con tantas necesidades de otro tipo que tenemos’. ¡Hágame caso y rece, usted que es creyente, porque Dionisio esté vivo el 14 de enero de 2013! Se lo agradecerá.

Atentante: el de la foto y firma de arriba.

PD.- Por cierto, ya soy de nuevo abuelo. Raquel y Chuchi ya tienen un precioso hijo al que han llamado Asier. Un abrazo para los tres y mi gratitud para el magnífico equipo de profesionales, a pesar de lo que cae, que había de guardia en la ‘madugá’ de este viernes al sábado. Mi reconocimiento para todo el grupo encabezado por el doctor Mestanza y la entrañable María López Gómez. Excelente trabajo en un parto con algunas complicaciones.