Redacción La Voz del Tajo | Miércoles 23 de abril de 2014
La reunió que mantuvieron Izquierda Unida y la Asociación de Afectados por la Ponencia de Valores de Talavera (APOVATA) sirvió para analizar las consecuencias económicas y funcionales que sobre la población está teniendo y tendrá la revisión de los valores catastrales, su repercusión en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y otros impuestos, especialmente en terrenos rústicos que el POM ha recalificado como urbanizables. IU recordó que en noviembre de 2006 ya advirtieron al equipo redactor del plan urbanístico y a la Comisión de Planeamiento de las “graves contradicciones y la irracionalidad de las decisiones que contemplaba el POM”, señalaron en nota de prensa.
Ambas organizaciones coincidieron en “la urgencia y la necesidad” de una profunda revisión del POM, para que “lo ajuste a las necesidades reales de la ciudad para su periodo de vigencia” y consensuar con los otros partidos una solución.
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