El diario El Mundo ha publicado este domingo en exclusiva mensajes de WhatsApp que se intercambiaron en 2020 y 2021 el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el entonces ministro de Transportes y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos (actualmente investigado por el Supremo).
Según El Mundo estos mensajes forman parte del 'Caso Koldo' y han aparecido en dos discos duros en casa de Koldo García (exasesor de Ábalos). Durante los registros realizados en el marco de la investigación, la Unidad Central Operativa (UCI) de la Guardia Civil localizó dos memorias en casa del investigado.
En muchos de esos WhatsApp, según El Mundo, los mensajes revelan cómo Sánchez y Ábalos coordinaban la estrategia política del PSOE, gestionaban crisis internas y maniobraban para consolidar el liderazgo del presidente, y que se imponga su postura frente al la crítica dentro de su propio partido.
Entre sus objetivos: el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, único barón socialista que revalidó la mayoría absoluta en las pasadas elecciones autonómicas. "Que Page deje de tocar los cojones", llega a decir.
Pedro Sánchez le pide a Ábalos, "para ir todos en línea", que se centre en controlar a cuatro presidentes autonómicos de entonces: Javier Lambán (Aragón), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha, el único que sigue en la primera línea y gobernando), Guillermo Fernández Vara (Extremadura) y Ximo Puig (Comunidad Valenciana).
El 8 de noviembre, Sánchez le escribe a Ábalos: "Acabo de terminar de leer la entrevista vomitiva que La Razón le hace a Page... Creo que convendría que tanto tú como Santos le pegárais un toque y que dejara de tocar los cojones". "Ok", responde Ábalos.
En esa entrevista, el presidente de Castilla-La Mancha califica de "humillación" el indulto a los presos independentistas.
Cuatro años después de esos mensajes, Emiliano García-Page es el único barón socialista que resiste y gobierna su comunidad, y lo hace con mayoría absoluta.
El Mundo resalta que Page sigue manteniendo su independencia, pese a las presiones que reflejan los mensajes de WhatsApp revelados hoy.