La ilusión se ha desbordado en Talavera de la Reina (Toledo) de cara al próximo domingo con el cartel de San Isidro en el que actuarán Morante de la Puebla, Alejandro Talavante y Tomás Rufo ante toros de Alcurrucén. Hablamos con Tomás Rufo a solo tres días de una cita que ha levantado una gran expectación.
¿Cómo te encuentras Tomás?
Ilusionado porque Talavera es uno de los momentos más especiales del año para mí y lo vivo desde que soy anunciado con la misma ilusión con la que lo viví cuando supe que iba a hacer mi primer paseillo en Mondas.
¿Se siente el mismo gusanillo aunque vaya pasando el tiempo?
Desde luego. Pasa igual que cuando tú escuchas el pasodoble Gallito ya que automáticamente tu mente evoca Talavera. Con este ejemplo te digo lo mismo que cuando voy a rezar a la Virgen y miro a la derecha siento ese cosquilleo que yo creo que no se me va a ir nunca.
¿Es la base de tu historia con Talavera?
La base yo diría que es el compromiso mutuo. Yo he tenido claro desde el primer día que iba a hacer por Talavera todo lo que estuviera en mi mano pero que esta historia tan bonita iba a seguir mientras en la plaza yo ofreciera siempre algo más que el día anterior. El cosquilleo de torear en casa, la responsabilidad de estar con tu gente y no fallar te hace siempre dar un paso más.
¿Qué tiene Talavera que la hace tan especial?
La historia es apabullante y de manera personal te diría que es una parte esencial para todos los talaveranos. El poder vivir estas dos cosas con la pasión con la que se vive cada tarde es algo muy difícil de explicar. Es una plaza con personalidad propia, que exige pero se entrega y mi relación con ella siempre me hace dar un paso más.
Este domingo un cartel de gran compromiso con dos grandes figuras del toreo.
Hablar del maestro Morante es hablar de la historia del toreo y me siento un privilegiado de torear con él. Su presencia es un acicate para todos los toreros y es lo que uno sueña. El maestro Talavante tiene una historia que habla por sí misma y viene de salir a hombros en Madrid. Creo que los ingredientes son para una tarde de las que no se van a olvidar.
¿Te resulta más difícil pasear por Talavera?
No. Es cierto que muchísima gente me conoce y lo único que recibo por las calles es cariño y respeto. Muchísima gente te para para desearte suerte y para felicitarte cuando se ha enterado de algún resultado mío y yo encuentro mucha paz por Talavera.
Ya has sido pregonero, Antonio Rubio te dio las llaves de la plaza, siete salidas a hombros, saque de honor en El Prado... ¿Qué te empuja a seguir adelante?
Todas estas cosas que me dices son un auténtico honor y de las que me siento orgulloso y agradecido. Lo que se puede esperar de mí es cumplir la promesa de dar siempre todo por Talavera e irme al hotel siempre con la sensación de haberme vaciado. Es la mejor forma que tengo de agradecer a Talavera tanto cariño.
No podemos olvidarnos de tu pueblo, Pepino. El domingo seguramente se vivirán estampas de antaño con el pueblo completamente vacío por estar en Talavera.
Es mi casa, con éso te diría todo. Es un orgullo para mí recordar como llenaban autobuses para verme en Casarrubios del Monte como novillero sin caballos y como lo siguen haciendo con la misma ilusión y cariño para verme en Madrid. Vivir todo lo que estoy viviendo de su mano es algo que jamás podré agradecerles.
Vamos terminando. Una temporada con un buen comienzo y un reto por delante triplicado en Madrid.
La temporada ha comenzado muy bien con la salida de hombros en Valencia y también con mi debut en Arles saliendo también a hombros. Fueron dos golpes muy importantes que han marcado el comienzo de temporada y el viernes la relación con Sevilla se mantuvo con una oreja que considero muy importante.
En cuanto al reto de Madrid es a ella a la que debo el lugar que ocupa en la actualidad y mi obligación es dar todo para honrar el privilegio de verme tres tardes en Las Ventas.
Nos hablan muy bien de las tardes de Almoguera, Roquetas y Jerez con una gran obsesión por torear muy despacio.
Son tardes que han sumado mucho para mí porque he podido ir un paso más en mi idea de torear despacio y de adormecer el temple. Quiero que los toros embistan en mi muleta y en el capote cada vez más lentos y estoy notando avances que me hacen realmente feliz pero quiero ir más allá.
En Talavera lo veremos.
Allí estaremos y quiero aprovechar para darte las gracias por el seguimiento a la temporada que haces y que tanto ayuda para que la gente me siga con la ilusión que noto.