El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha inaugurado este lunes las nuevas instalaciones del Centro de Salud de Mira (Cuenca), rehabilitado de forma integral tras los graves daños sufridos durante la DANA que azotó la localidad a finales de octubre del pasado año. El centro, ahora totalmente operativo, prestará atención sanitaria a cerca de un millar de personas.
La infraestructura ha sido renovada en su práctica totalidad: se han sustituido los paramentos interiores, carpinterías de aluminio y cristaleras, así como todas las instalaciones eléctricas, de calefacción, voz, datos y gases, que quedaron inservibles tras la fuerte riada que afectó a la localidad.
Durante el acto, García-Page ha recordado la coordinación entre administraciones durante aquel episodio meteorológico, y ha querido dedicar la inauguración a Celsa, la vecina fallecida a consecuencia del temporal.
El presidente ha aprovechado para reivindicar el valor del sistema sanitario público, al que ha calificado como "un privilegio", destacando que en España "se vive más y mejor" gracias a servicios como el acceso universal a la sanidad y la medicación.
"Hoy Castilla-La Mancha es capaz de atender más del doble que hace diez años, con más de 100 millones de actos sanitarios al año", ha subrayado, asegurando que este crecimiento implica "más edificios, más tecnología", pero también la necesidad de seguir cuidando y reforzando el sistema.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha incidido en la importancia de acercar la sanidad a las zonas rurales y reforzar la Atención Primaria como parte esencial del modelo de salud regional. Ha defendido que la política sanitaria del Gobierno autonómico tiene en estas dos líneas de acción —proximidad y prevención— sus pilares fundamentales.
En la misma línea, el presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana, ha recordado cómo las instituciones locales actuaron con rapidez tras la DANA. En una alusión indirecta al presidente valenciano, Carlos Mazón, ha señalado que tanto él como la alcaldesa de Mira, María Miriam Lava, estaban "localizados" durante aquellos días críticos. "Nos pusimos a trabajar desde el primer momento, aprendimos y dimos respuestas desde lo local", ha destacado.