Luis González
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
Como son tantas, quizá no sepan a cual me estoy refiriendo, pero se lo explicaré. ¡Es la de 110!
No hombre, no, tampoco te pases, amigo lector, no es que sea la número 110…, aunque si empezáramos a contar desde el principio, ¡quién sabe…! Probablemente, no será la última, pero seguro que sabéis que me refiero a eso de circular a ciento diez kilómetros por hora en las autopistas y autovías. ¡Con los coches que tenemos en el mercado y en circulación, es un tanto difícil circular a esa velocidad! La verdad que nadie tiene muy claro a quién favorece esa reducción de la que nos hablan. Parece ser que la razón principal es para ahorrar combustible. ¿Será eso cierto? ¿Cómo han hecho la comparación?... Creo que lo deberían explicar mejor al público para que nos enteremos bien. Naturalmente todos comprendemos que un coche que marcha a una velocidad inferior, en las mismas condiciones de espacio y tiempo, ciertamente que gastará menos, y hasta es posible que se pueda ahorrar un quince por ciento, según unos ministros porque según otros parece ser que puede ser un tres por ciento. (Ya no hay acuerdo ni siquiera entre ellos) Pero dejemos esa polémica y ciñámonos a lo nuestro. Un amigo mío, pintor, que no entiende mucho de coches, me dijo que también es verdad que un coche puesto en marcha más tiempo, gasta más que otro que esté menos tiempo. Entonces, veamos…, antes desde Talavera a Madrid, (sólo es un ejemplo teórico) a 120 Km/h. se tardaba una hora exacta, pero ahora se tardará más de una hora, aproximadamente seis minutos más, por lo que el coche estará durante todo ese tiempo consumiendo gasolina; ahora yo me pregunto… ¿llegará a gastar lo mismo que el que ya paró hace seis minutos? ¿Cuánto más ó cuanto menos? ¿No habrá más vehículos circulando y por más tiempo?... ¿De verdad merecerá la pena haberse gastado 250.000 euros en pegatinas?...
Así mismo, los constructores de coches nos venden el vehículo diciendo que con la sexta marcha, (o marchas largas) una vez alcanzada la velocidad estable, el coche gasta menos que con las velocidades cortas. Entonces… ¿a qué debemos atenernos? ¡Está visto que cada cual arrima el ascua a su sardina y nos predican aquello que les conviene en cada momento! Por otro lado, ¿no tendrá que ir la gente más pendiente del cuenta-kilómetros del coche que de la carretera? Porque cualquier coche de hoy enseguida se dispara a esa velocidad. ¿No será, me decía otro amigo, que les conviene reducir la velocidad para captar más multas?... ¿Cuándo bajarán los impuestos de las gasolinas para que ahorremos más los ciudadanos? Resulta que cuando sube el precio del barril en crudo, nos suben el combustible, pero después, cuando bajan, no vuelven…, al menos en la misma proporción, a sus precios anteriores. ¡Lo tenemos que seguir pagando más de lo que antes se encontraba! Además, ¿quién paga la gasolina, el Estado o los ciudadanos? ¿Me van a controlar a mí en qué me gasto mis cuartos? ¿Quién es nadie, para decirme en qué me puedo gastar yo mis ahorros? Más valiera que vigilaran más, por ejemplo, los precios de los intereses de los bancos que me dan un 0,01 por ciento de interés por los euros que tienen míos y después me cobran un 24% de intereses (de demora, dicen) del dinero que yo pueda tener suyo. (Bueno, suyo no, de otros a los que les van a dar un 0,01 por ciento, cuando a mi me hayan cobrado el 24%) ¿Eso no son capaces de vigilarlo los gobiernos ó hacer alguna ley que lo regule mejor? Esto sólo es una pincelada de lo que se podría vigilar mejor.
De la misma manera, ¿va a resultar, igualmente, rentable el circular a 30km./h por ciertas zonas de la ciudad? ¿No se van a generar más atascos y por tanto se provocarán más humos, más tiempo en hacer los mismos recorridos, más nerviosismo…, menos accidentes o más, aunque nadie va a negar que menos aparatosos y menos dañinos, eso sí? Es innegable que un accidente a una velocidad de 120 kms./h. ó 40 kms./h es más fuerte el golpe que el que se produzca a 110 ó a 30, pero puestos así, menos perjudicial sería a 90 y a 20, pero…¿en qué año estamos? Resulta que vamos circulando hacia atrás.
Se debería recomendar el circular a esas velocidades, pero no imponerlo por ley. Cada uno que se gaste su dinero en lo que le parezca bien. Seguramente que hay quien prefiere gastarse los euros en gasolina antes que en otros vicios. ¡Demasiada intromisión en la vida del ciudadano, Sr. ZP!