Varios trabajadores de la plantilla del supermercado Simply, que terminarán de prestar sus servicios a la firma el próximo 4 de febrero, han querido puntualizar algunos aspectos tras el cierre de este establecimiento. En primer lugar, y tras haberse agotado los quince días de negociación entre la empresa y los representantes de los trabajadores, echan de menos una negociación más ardua y que se ejerciera mayor presión, “aunque los resultados hubieran sido los mismos finalmente”, señala uno de ellos.
La semana pasada Comisiones Obreras informaba en nota de prensa que los 30 trabajadres percibirán una indemnización de 29 días por año trabajado con un tope de 15 mensualidades, pero ellos quieren indicar que la primera propuesta fue “el cierre con traslado”, de hecho todos ellos tenían asignados otros supermercados de la cadena repartidos por el país. Pese a ello, finalmente todos han aceptado la indemnización dado que en esta ciudad tienen obligaciones familiares, hipotecarias o de otra índole. La solución más sensata al final fue la de aceptar la indemnización propuesta por Simply.
Igualmente, negaron que desde el Ayuntamiento hayan intermediado para evitar sus despidos, algo que quieren puntualizar tras las declaraciones vertidas por la portavoz municipal, María Rodríguez, en las que hablaba del asunto, aunque son conscientes de que “nada podía hacerse desde el Consistorio frente a la decisión de una empresa privada”.
Finalmente, todos ellos irán al paro con la esperanza de que una nueva empresa retome sus contratos como ha venido sucediendo desde el año 2000. Aunque el número de empleados había descendido en estos quince años de más de 60 a los 30 actuales, todos ellos habían formado parte de la plantilla que se contrató en el 2000 por la firma Alcosto para este supermercado ubicado en la Avenida de Francisco Aguirre. Los contratos del mismo personal fueron asumidos después por las empresas Caprabo, Eroski y, finalmente, Simply.
Estos trabajadores también quieren dejar constancia del compromiso que han tenido con la empresa en todo momento, ya que en el año 2012 aceptaron una bajada en sus salarios para evitar el despido de ninguno de ellos. En la nota de prensa de CCOO informaron que el grupo Sabeco, del que depende Simply, se comprometió a que si en un plazo de cinco años vuelve a reabrir algún centro en Talavera, la plantilla despedida tendrá prioridad para reingresar en la empresa. Simply reconoció que desde 2010 la situación se ha tornado “insostenible”, debido al desplome de las ventas y pérdidas acumuladas que hacían inviable mantener su actividad en este centro.