Tras la celebración de la Comisión Ejecutiva del Consorcio de la Ciudad de Toledo, el Ayuntamiento ha anunciado un importante paso adelante en la revitalización del Casco Histórico.
El alcalde, Carlos Velázquez, ha presentado un ambicioso plan de rehabilitación que se pondrá en marcha a través de un Protocolo General de Actuaciones suscrito entre el Consorcio y la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda (EMSV).
Este acuerdo, firmado por los gerentes de ambas entidades, Jesús Corroto (Consorcio) y José Manuel López (EMSV), establece un marco de colaboración institucional cuyo objetivo es impulsar la recuperación de edificios en desuso, ruina o infrautilizados en el centro histórico de Toledo.
Bajo la presidencia del alcalde, este protocolo marca un nuevo horizonte en la estrategia de recuperación urbana, preservación patrimonial y revitalización social del corazón histórico de la ciudad.
MÁS ALLÁ DE LA CONSERVACIÓN: UN CASCO HISTÓRICO VIVO Y SOSTENIBLE. Velázquez ha subrayado que la rehabilitación del Casco Histórico no se limita a conservar su valor cultural y arquitectónico, sino que pretende convertirlo en un entorno habitable, sostenible y dinámico.
“Queremos que vuelva a ser un lugar atractivo para vivir, especialmente para los jóvenes, con servicios, oportunidades y calidad de vida”, ha afirmado, poniendo el foco en la lucha contra la despoblación y el impulso a la economía local.
Según los estudios técnicos realizados recientemente por el Consorcio, se han identificado 83 inmuebles en diferentes estados de ruina, 131 viviendas desocupadas y 23 solares vacíos, lo que refleja la necesidad urgente de intervención en áreas clave del Casco Histórico.
REHABILITACIÓN CON FINES RESIDENCIALES, NO TURÍSTICOS
La EMSV, como entidad instrumental del Ayuntamiento, aportará su experiencia técnica para acometer actuaciones directas de rehabilitación, priorizando su uso como vivienda habitual y permanente. El protocolo excluye expresamente la explotación turística de estos inmuebles, en un claro compromiso con la recuperación del tejido vecinal y la vida cotidiana del barrio.
COORDINACIÓN INSTITUCIONAL Y HOJA DE RUTA COMPARTIDA
El gerente del Consorcio, Jesús Corroto, ha explicado que el acuerdo se basa en los principios de cooperación y coordinación entre administraciones, y que dará lugar a convenios específicos adaptados a cada inmueble. Además, se creará una Comisión Mixta de Seguimiento, integrada por representantes de ambas instituciones, encargada de velar por el cumplimiento y desarrollo del protocolo.
El documento tendrá una vigencia inicial de cuatro años, con posibilidad de prórrogas, y no conlleva compromisos económicos inmediatos, aunque sí establece una hoja de ruta clara para transformar el Casco Histórico en un espacio más habitable y humano.