La nueva ley de Administración local vigilará las cuentas de los Ayuntamientos trimestralmente para evitar el déficit

El Gobierno aprobó a finales del mes de julio, finalmente, la reforma de la administración local. Para ello, tuvo que hacer algunos cambios significativos respecto al borrador inicial, como la sustitución del concepto 'coste estándar', que contemplaba la pérdida de competencias municipales para que fueran prestadas por las Diputaciones, por el de 'coste efectivo', que únicamente obligará a los Ayuntamientos a hacer público el coste de sus servicios municipales en un plazo de tres meses y a no tener cuentas deficitarias. Así lo anunció el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, después de un Consejo de Ministros donde el Proyecto de Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, fue duramente criticado por toda la oposición.

Según el ministro, el nuevo 'coste efectivo' es meramente un elenco de transparencia con el que se “gana” en términos de “publicidad y comparación”, ya que los ciudadanos serán conscientes del coste del servicio público municipal.

Otras de las nuevas normas que más llaman la atención son los incentivos a los pueblos que fusiones sus competencias, la bajada y control de sueldos a los alcaldes, donde los regidores de municipios con menos de 1.000 habitantes no percibirán ninguna retribución económica o la pérdida de competencias si algún municipio obtiene cuentas en 'rojo'.

En la Voz del Tajo hemos puesto 'voz' a algunos de los representantes afectados, concretamente a ocho alcaldes de municipios de la comarca de Talavera. Para ello, hemos preguntado por las cuestiones que más pueden interesar a sus respectivos habitantes.

La medida del ‘coste efectivo’ es la más aceptada por los alcaldes, cuya opinión coincide excepcionalmente al considerar que es una medida acertada. No ocurre lo mismo en lo relativo a las fusiones entre pequeños municipios, quizá la medida más polémica. Santos García, alcalde de El Casar de Talavera, asegura que proponer fusiones es como “declarar la guerra entre municipios” y explicó a este semanario que ya se ha intentado y que no funcionó ni funcionará.

En la misma línea se mostró Hortensia de la Casa, primera edil de Castillo de Bayuela, quien asegura ser reacia a este tipo de iniciativas y lanza una pregunta a las instituciones “¿tendrán también incentivos aquellos pueblos que sin fusionarse consigan unas cuentas saneadas?”. No piensan lo mismo, sin embargo, otros alcaldes como el de Talavera la Nueva, Vicente Sánchez, que asegura que “podría ser una buena medida para pueblos con poca población”,

En cuanto a la pérdida de competencias, como es lógico, tampoco se ponen de acuerdo. Pablo Barroso, alcalde de la localidad de Segurilla, expresó que “las administraciones públicas deben ser las primeras en dar ejemplo y nadie puede volver a gastar al libre albedrío”, declaración que comparte Gabriel López-Colina, alcalde de Calera, señalando que “uno de los motivos de la reforma local es el ahorro. No se pueden pagar unos servicios que no se pueden mantener”.

Por el contrario, Ignacio Moreno, edil de Alcolea del Tajo, opina que “hay que dar un margen al déficit de los municipios, ya que puede darse por muchos motivos y no sólo por una mala gestión”, como sería una catástrofe natural, aunque reconoce que “si el déficit siguiera igual al año siguiente, entonces claro que deberían ceder las competencias”.

Finalmente, el control de los sueldos de los alcaldes resulta una medida muy positiva para Rubén del Mazo, alcalde de Cebolla, quien piensa que “así por fin sabremos qué debe ganar un alcalde por ley, para que nadie pueda cambiarlo aunque tenga una holgada mayoría”. Que los alcaldes de localidades de menos de 1.000 habitantes no reciban ninguna retribución, no es una medida bien recibida para los afectados, como Santos García, quien considera que “discriminar u olvidar a los municipios de 1.000 habitantes es olvidar a la mitad de España”. Prados Gómez, primera edil de Gamonal, subrayó que “la mayoría de los alcaldes de pueblos de menos de mil habitantes ya no están percibiendo ningún salario por su gestión política”.

No sabemos si esta nueva reforma será positiva o negativa, lo único que queda claro es que la clase política sigue sin ponerse de acuerdo, aunque sea en reformas que atañen a todos.

Alcaldes entrevistados

Santos García (PSOE), alcalde de El Casar; 200 habitantes.

Rubén del Mazo (PP), alcalde de Cebolla; 3.900 habitantes.

Vicente Sánchez (PP), alcalde de Talavera La Nueva; 1.500 habitantes.

Prados Gómez (PSOE), alcaldesa de Gamonal; 970 habitantes.

Pablo Barroso (PP), alcalde de Segurilla; 1.300 habitantes.

Gabriel López-Colina (PP), alcalde de Calera y Chozas; 4.700 habitantes.

Ignacio Moreno (PSOE), alcalde de Alcolea; 916 habitantes.

Hortensia de la Casa (PSOE), alcaldesa de Castillo de Bayuela; 1.024 habitantes.

Salario alcaldes según población

Menos de 1.000 habitantes: sin retribución
Entre 1.000 y 2.000 habitantes: 20.000 euros/año
Entre 2.000 y 5.000 habitantes: 30.000 euros/año
Entre 5.000 y 10.000 habitantes: 40.000 euros/año
Entre 10.000 y 20.000 habitantes: 40.000-50.000 euros/año
Entre 20.000 y 50.000 habitantes: 50.000 euros/año
Entre 50.000 y 75.000 habitantes: 60.000 euros/año