Una diputada del PP y víctima del accidente ferroviario de Santiago: 'Pastor debe cesar a los responsables de Adif y Renfe'
La diputada del Partido Popular en la Comunidad de Madrid fue una de las víctimas del terrible accidente ferroviario sucedido en Santiago hace algunas fechas
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
“No pueden seguir contando que fue sólo una cosa del conductor. Ese rollo ya lo sabemos. Al cabo de tres días han puesto el sistema de seguridad que tendrían que haber puesto antes: no estaba puesto, faltaba, y eso es su responsabilidad”. “Ellos” son los representantes de Renfe y Adif, así como el Ministerio de Fomento, tanto el presente como el anterior. Éstas sob las palabras de María Gómez-Limón Amador, diputada en la Asamblea regional por el PP de Madrid. Pero esta vez hablando como víctima y no como política que ha querido explicar a El Confidencial su visión sobre el accidente de tren de Santiago, que vivió en primera persona.
Gómez-Limón viajaba en ese tren dirección Ferrol. Hoy tras dos semanas en el Hospital de A Coruña en donde se ha recuperado de las lesiones producidas durante el accidente, tiente claro lo ocurrido: Allí hubo muertos y heridos. Pero los responsables siguen cobrando”.
La diputada regional popular por la Comunidad de Madrid está lista para personarse como acusación popular en nombre de las 79 personas que ya no podrán hacerlo, “en cuanto hable con los abogados, no cabe duda que lo haré”.
Para Gomez-Limón sus lesiones físicas son lo que menos la preocupa: “Nos han destrozado la vida”, explica a El Confidencial, refiriéndose a todas las personas que viajaban en ese Alvia. En el accidente se fracturó un pie, el esternón y la segunda vértebra cervical. Tras una intervención quirúrgica en la que le ha sido imputado un hueso de la cadera y 16 días de hospitalización en Santiago, ha podido volver a su casa a Madrid.
La diputada popular no se ha extrañado de que el Juez Aláez haya imputado a los responsables de Adif, “la responsabilidad de una máquina de miles de toneladas que puede alcanzar los 200 kilómetros por hora no puede dejarse en manos de una persona ¿por qué no hay dos conductores? Se pregunta.
En su entrevista a El Confidencia destaca también el abandono que han tenido los familiares de las víctimas a los que les pusieron a su disposición una oficina de atención en la que había dos ordenadores y un teléfono, “desde el punto de vista logístico ha sido penoso”.