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La alegría se desató en la plantilla blanquiazul tras finalizar el encuentro. (Foto: D.M.) |
El CF Talavera ya es de Tercera
miércoles 23 de abril de 2014, 10:51h
Ambiente festivo el que se vivió en la tarde del pasado domingo en un abarrotado Municipal El Prado que congregó a más de 1.500 personas para vivir el ascenso del CF Talavera a la Tercera División. En el palco de autoridades estuvieron presentes varios miembros de la Corporación Municipal, presidido por el Alcalde de Talavera, Gonzalo Lago, así como ex entrenadores del Talavera CF, como Gregorio Manzano, entre otros.
El público estuvo muy metido en el partido, desde el momento en el que ambos equipos saltaron al terreno de juego. Los cerámicos fueron los que golpearon primero en lo que a ocasiones de gol se refiere, con acercamientos de Ibra y Manasé, pero sus disparos no consiguieron poner en apuros al portero del Daimiel, Maxi. A pesar de estas primera oportunidades de los de la Ciudad de la Cerámica, los de la provincia de Ciudad Real salieron con aires más ofensivos que en el primer partido de la eliminatoria, lo que les hizo poder disfrutar de alguna que otra oportunidad clara en la primera mitad. Raúl Martín fue el que dispuso de la más clara con un ajustado lanzamiento de falta que obligó a estirarse al meta cerámico, Ángel Luis.
Con el resultado de cero a cero se llegó al final de los primeros cuarenta y cinco minutos, y mientras que el resultado no se moviera, todo iba bien para los intereses de los blanquiazules.
Con el inicio de la segunda parte, el Daimiel salió más a la ofensiva, pero sin conseguir llegar con claridad a la portería talaverana, salvo en las jugadas a balón parado, en las que estaban creando mucho peligro. Como en el lanzamiento de falta de Ismael Torres que se estrelló en el palo de la portería talaverana, silenciando por un momento el Municipal talaverano.
Los minutos fueron pasando muy lentos para los de casa, viendo como el Daimiel estaba consiguiendo encerrar en su área a éstos, pero ya en la recta final del partido, los de Talavera aprovecharon la táctica del contragolpe para disfrutar de ocasiones, y ya con dos minutos sobre el tiempo reglamentario, David Timón anotó el tanto de la victoria que desató la locura en las gradas, con el que finalizó el partido.
Varios centenares de aficionados saltaron sobre el terreno de juego para celebrar el ascenso con los suyos. Despues del típico manteo al entrenador, los jugadores enfilaron el camino de vestuarios, en donde recibieron la felicitación del Alcalde cerámico y se dirigieron hacia la Plaza de España en donde prosiguieron los actos de festejos.
Al ver que no había agua en la Plaza de España, se marcharon a la Avenida de Toledo, donde pudieron deleitarse en la fuente celebrando el merecido ascenso.