El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha descartado la "movilización interna" dentro del partido ya que "está prohibida en el ambiente", ha hablado del papel de los diputados socialistas en el Congreso ante una hipotética moción de censura, y avisa de que el "búnker" se está "quedando sin oxígeno".
En una entrevista en la Cadena COPE, en el programa de Carlos Herrera, García-Page ha incidido en que él es quién para decirle a los diputados lo que tienen que hacer. "Si lo hacen o no no será por instrucción mía. Soy demócrata, la solución tiene que venir democráticamente. Yo si fuera diputado, no votaría en contra, porque habría dimitido".
El líder de los socialista castellano-manchegos ha elevado el tono ante la situación actual que atraviesa la dirección del PSOE tras los últimos escándalos que han salpicado al ex 'número dos' del partido, Santos Cerdán, mostrándose muy "dolido" y lanzando varios mensajes a Pedro Sánchez, asegurando que "no hay salida digna" a esta situación; deslizando que "queda mucho por saberse" más allá de los titulares de hoy en día y lamentando que el momento de credibilidad del partido "es grave".
Ha incidido en que lo peor es que estamos en "el momento más grave de credibilidad del PSOE en toda su historia reciente"."Es enormemente grave, muy poca gente cree a la dirección. Son muchas las veces que se dice que es acoso pero el papel de víctima ya no cuela", en un claro mensaje al presidente de Gobierno de España.
Ha reivindicado aquí "el papel de la justicia de la UCO" ante los ataques a veces incluso de "ministros que debieran velar por su buen funcionamiento".
Ahora, "cuando empiecen con campañas" contra el PSOE, ha dicho que él trabajará por reivindicar "al PSOE sin apellidos, no el de Page, no el de Sánchez, el que tiene una larga historia de servicios al país".
Tammbién ha admitido estar muy dolido, si bien "el PSOE es muchas cosas, más que Sánchez, que Page y que Ábalos", punto en el que ha recordado a todos los socialistas que "no pierden el aliento nunca".