Los trabajadores del servicio de Urgencias del Hospital de Toledo han remitido un escrito a la dirección del centro para que tome cartas en el asunto y realice las mejoras necesarias para paliar los riesgos a los que, según denuncian, se ven sometidos tanto el personal sanitario como los pacientes que acuden a este servicio. Según publica CadenaSER.com., la carta recuerda la auditoría que ya en 2010 detectó problemas en las urgencias y dicen que esas deficiencias no solo no se han subsanado sino que han ido aumentando. Por otra parte, alertan de que el uso del pasillo central y de los boxees de medicina interna para colocar a los pacientes ha pasado de ser algo ocasional a estar institucionalizado desde hace más de dos años. Las camillas, en muy mal estado, escasean continuamente, continúa el texto, y en multitud de ocasiones resulta imposible colocar a los pacientes bloqueándose sistemáticamente el servicio de ambulancias. La dotación de personal, explican en el escrito, se modifica según las necesidades asistenciales y el triaje, es decir el sistema de calificación de pacientes por gravedad, es un programa incompleto ya que solo se ha comprado la primera parte.