El sindicato CCOO ha anunciado la convocatoria de huelga en la empresa heladera Casty, con sede en Talavera de la Reina, por primera vez en sus 40 años de historia. La decisión llega tras denunciar lo que califican como “condiciones miserables” que sufre la plantilla, con sueldos mínimos, pérdida de derechos adquiridos y condiciones laborales extremas.
Federico Pérez, secretario general de CCOO en Toledo, ha comparecido ante los medios para explicar los motivos de esta medida. “Estamos ante uno de los peores convenios laborales legalmente sostenibles en este país”, ha asegurado. Según Pérez, más de 300 trabajadores han votado en contra del preacuerdo alcanzado entre la empresa y el comité de empresa liderado por UGT, al considerarlo “miserable” y una “regularización de la precariedad”.
Entre las condiciones criticadas por CCOO se encuentran el trabajo obligatorio en fines de semana y festivos por “cantidades irrisorias”, turnos nocturnos pagados a tan solo un euro por noche, y la equiparación del pago de las horas extraordinarias con las ordinarias. Además, los trabajadores deben recuperar las horas que dedican a acudir al médico. A ello se suma la exposición a temperaturas extremas de hasta -40 ºC y a movimientos repetitivos sin medidas de protección adecuadas.
Javier García, secretario de Acción Sindical y Negociación Colectiva de CCOO Toledo, ha subrayado que “la plantilla lleva más de cuatro décadas trabajando en condiciones penosas sin ninguna contraprestación” y denuncia que, pese a ello, la empresa ha facturado más de 30 millones de euros en los últimos meses. “No hay ni un solo trabajador en España que cobre menos que los de Casty”, ha afirmado.
Por ello, CCOO ha exigido a la familia Castillejo, propietaria de la empresa, la firma de un convenio colectivo “digno” y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía de Talavera y su comarca para que apoyen las reivindicaciones laborales de la plantilla.
UGT RECHAZA LA HUELGA Y ALERTA DE SU ILEGALIDAD
Por su parte, UGT ha salido al paso de la convocatoria calificándola de “ilegal” y “una grave irresponsabilidad”. El sindicato ha recordado que ostenta la mayoría absoluta en el comité de empresa de Casty y que la mesa de negociación del convenio colectivo sigue abierta.
En un comunicado, UGT ha detallado que ya se han alcanzado “avances importantes”, como una reducción de jornada, una subida salarial de al menos el 8,5 % más el IPC real para los años 2026 y 2027, y mejoras en los permisos médicos. A su juicio, la convocatoria de huelga interfiere en el proceso negociador y puede derivar en sanciones disciplinarias para los trabajadores que la secunden, así como responsabilidades económicas para CCOO.
“La vía del diálogo no está cerrada. Apostamos por una negociación seria, no por imponer conflictos que perjudican a los trabajadores”, ha asegurado la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT.
UN CONFLICTO SINDICAL ABIERTO
La convocatoria de huelga abre un conflicto sindical inédito en Casty, con dos visiones enfrentadas: la de CCOO, que denuncia un modelo empresarial basado en la precariedad pese a los beneficios millonarios de la empresa; y la de UGT, que defiende la negociación como vía para lograr mejoras sustanciales para la plantilla.
Mientras tanto, los 450 trabajadores de la heladera Casty quedan en medio de esta pugna, enfrentándose a la disyuntiva entre ejercer su derecho a la huelga o atenerse a posibles consecuencias disciplinarias.
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