Los alcaldes de Toledo y Talavera de la Reina, Carlos Velázquez y José Julián Gregorio, han coincidido este jueves en el IX Foro Ibérico del Corredor Sudoeste Ibérico, celebrado en Madrid, en trasladar su preocupación por la falta de avances en el proyecto de la línea de alta velocidad que conectará las ciudades Patrimonio de la Humanidad de España y Portugal.
Durante su intervención, el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, lamentó que los años 2024 y 2025, que “debían haber sido decisivos” para el desarrollo de la infraestructura, hayan transcurrido sin que se adoptaran las decisiones necesarias. “En mayo del año pasado estábamos llenos de ilusión, pero esa ilusión, por desgracia, se ha tornado en decepción”, expresó.
Velázquez subrayó la importancia estratégica de Toledo en la futura conexión internacional, recordando que es “la ciudad de España con mayor número de visitantes por habitante”, con más de tres millones de turistas anuales, además de contar con un entorno turístico en expansión gracias a Puy du Fou, que supera el millón y medio de visitantes al año.
El regidor toledano recordó que a finales de 2024 el Ayuntamiento mantuvo una reunión “esperanzadora” con el Ministerio de Fomento, en la que se presentaron dos alternativas para la ubicación de la futura estación. Sin embargo, reconoció que “problemas de carácter político y discrepancias entre administraciones” han paralizado el proceso.
“Intentamos tender puentes entre el Ministerio y la Junta, con un trabajo serio y consensuado durante el periodo de alegaciones”, señaló Velázquez, quien recordó que el Ayuntamiento presentó sus alegaciones el 17 de marzo de 2025, con la participación de más de cien entidades. “Dábamos respuesta a todos los problemas planteados —medioambientales, arqueológicos, patrimoniales y sociales—, pero siete meses después seguimos sin respuesta del Ministerio”, denunció.
Aun así, Velázquez cerró su intervención con un tono optimista, citando a San Francisco de Asís: “Hagamos lo necesario, que es responder a esas alegaciones; hagamos lo posible, que es tomar decisiones, y quizá consigamos lo que hoy parece imposible: una línea de alta velocidad que una ciudades y países Patrimonio de la Humanidad antes de 2030”.
Por su parte, el alcalde de Talavera de la Reina, José Julián Gregorio, también reclamó al Ministerio de Transportes y al Gobierno central “celeridad y compromiso” para que el AVE esté operativo en 2030. Gregorio destacó la “oportunidad histórica” que representa este proyecto para Talavera y el resto de territorios del trazado, especialmente de cara al Mundial de Fútbol de 2030.
“El tiempo apremia”, advirtió el regidor talaverano, quien recordó que, más allá de la inauguración de una subestación eléctrica en Calera y Chozas el pasado julio, “no se han producido avances significativos”.
Gregorio insistió en que “el futuro de Talavera depende en buena parte de este proyecto” y destacó la unión de los territorios españoles y portugueses por los que transcurre la línea, “que apuestan firmemente por la puesta en marcha de la alta velocidad en 2030”.
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