El Gobierno de Castilla-La Mancha ha finalizado la renovación completa de los mamógrafos en los hospitales de la región, incorporando equipos de última generación que mejoran significativamente el diagnóstico del cáncer de mama.
El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) ha adjudicado la compra de siete mamógrafos digitales equipados con tecnología de tomosíntesis y mamografía de contraste para los hospitales de Almansa, Hellín, Villarrobledo, Tomelloso, Manzanares, Puertollano y Valdepeñas. Esta inversión, cercana a los dos millones de euros, cierra un ciclo de modernización tecnológica que afecta a todos los centros hospitalarios dependientes del SESCAM.
La tomosíntesis permite obtener imágenes tridimensionales de alta resolución, mejorando la visualización de lesiones y facilitando una detección más precisa del cáncer, especialmente en mujeres con tejido mamario denso. Esta tecnología reduce además la incidencia de falsos positivos, lo que disminuye la realización de biopsias innecesarias y el estrés que estas pueden generar en las pacientes.
Además, la incorporación de estaciones de postprocesamiento con inteligencia artificial, dentro del proyecto Ykonos, aumenta la capacidad diagnóstica y ayuda a los profesionales sanitarios a tomar decisiones terapéuticas más acertadas.
El plan de renovación tecnológico llevado a cabo durante la última década ha permitido reemplazar los equipos obsoletos por estos mamógrafos avanzados, que integran las ventajas clínicas y los beneficios para los pacientes de la mamografía con tomosíntesis. Esta tecnología no solo mejora la detección temprana del cáncer de mama, aumentando las posibilidades de tratamiento y curación, sino que también puede reducir la necesidad de pruebas complementarias.
La adquisición de estos mamógrafos ha sido posible gracias a los fondos del convenio con la Fundación Amancio Ortega, dentro del Plan de Acuerdos Marco de Equipos de Alta Tecnología Sanitaria del Ingesa (AMAT-I), que apoya la mejora tecnológica en el sistema público de salud.